El Rudolfinum en Praga es un templo de la música y el arte en un suntuoso palacio neorrenacentista a las orillas del Moldava.
Construido entre 1875 y 1885, el edificio neo renacentista se encuentra al borde del río Moldava. Obra de Josef Zítek (a quien se debe también el Teatro Nacional) y Josef Schulze (el Museo Nacional), el Rudolfinum es una de las construcciones arquitectónicas más importantes de la época.
Durante la Primera República, sirvió de sede al parlamento checoslovaco, antes de retomar su vocación inicial. El edificio alberga un tesoro acústico: la sala Dvořak que se destaca por su elegancia.
Se puede visitar este hermoso edificio y aprender más sobre su historia y arquitectura con una visita guiada, pero si queréis el máximo de las emociones debéis asistir a un concierto de música clásica, tal vez durante el prestigioso Festival Primavera de Praga.
Una de las salas más bonitas del complejo, la Dvorak Hall es una sala de conciertos de renombre internacional, muy bien decorada. Está dedicada al director de orquesta Antonín Dvořák que dirigió el primer concierto abierto al público el 4 de enero 1896.
La Galería Rudolfinum
La Galería Rudolfinum ocupa algunas salas del complejo neorrenacentista por un total de unos 1500 metros cuadrados.
No tiene una colección permanente, pero gracias a las exposiciones temporales organizadas se ha labrado un papel importante en el desarrollo de la escena del arte contemporáneo. Esta galería de arte moderno es parte del Museo de Artes Decorativas de Praga y fue inaugurada en 1994.
Cafetería
Hay una cafetería restaurante super tranquila, con climatización, en un edificio histórico.. a precios decentes en el centro de Praga.